La desconsideración hacia los demás es egoísmo puro

Una de estas tarde me acerqué a la panadería de mi barrio a comprar el pan y ese día solamente había una de las dos dependientas que suelen estar en el mostrador. La chica estaba bastante liada, era hora punta, el pan recién horneado, los compradores apurados por llegar a casa y la cola por supuesto más larga de lo habitual.

Había calculado que estaría allí unos 10 minutos hasta que me tocara mi turno, cuando fui testigo de un hecho que me causó estupor. El señor que estaba delante de mí, pidió a la dependienta cortar un pan de payés (pan rústico o pan de pueblo), la chica se lo hace, se lo trae y él al mirarlo dijo que no estaba contento con el tamaño, ni el grosor, ni la temperatura, que quería otro. La chica fue por otro pan, lo volvió a cortar y esta vez el desconsiderado cliente puso peros en el precio, en la bolsa, en las puntas del pan y le hizo himcapié que no había quedado de su total agrado.

En fin, montó varios poyos, que consiguió que se alargaran los diez minutos, que los clientes de atrás se fueran sin su pan y que la panaderia se paralizara por sus estrictas demandas. Para mi este señor, es alguien bastante desocupado, que no controla su reloj ni le preocupa el tiempo que pasa en la calle y una persona egoísta, que cree que solo vive él en el mundo. La dependienta suspiró cuando terminó de atenderlo y con mucha razón. Muy maja y educada por cierto para aguantarle.

La anécdota la cuento en este post porque alguna vez todos nos hemos topados con estos seres que andan en la vida despreocupados con sus manías molestando al prójimo. Para mi son seres egoístas, que carecen del respeto hacia los demás y la empatía la cargan a niveles cero. También estará la otra cara de la moneda y puede que nosotros hemos sido los desconsiderados importándonos un pito nuestros semejantes y sus sentimientos.

He observado la desconsideración en varios episodios cotidianos:

.-. Cuando alguien es imputual y hace esperar a los demás. Muchas veces dejando colgado a la persona sin explicación alguna.

.-. Cuando no se valora el trabajo, tiempo y dedicación de los demás. Restándole el valor que tienen los buenos actos.

.-. Cuando alguien aparca su coche en dos o tres puestos de estacionamiento o donde no lo debe aparcar.

.-. Cuando alguien cocina y los comensales se despachan criticándole el guiso, su esfuerzo y cariño.

.-. Cuando alguien tira basura donde no debe, en parques, playas, ríos, plena calle.

.-. Cuando alguien fuma delante niños, ancianos, asmáticos.

.-. El que se cuela sin ningún remordimiento en una cola, importándole un pepino el tiempo que llevan los demás en la misma.

.-. Los dueños de perros que dejan sus heces en plena calle y no la recogen como es debido.

.-.Los que te quieren usar de comodín o plan B cuando están aburridos y te buscan para que les sirvas en ese momento.

.-. La gente que va a comprar y se da un postín escogiendo sus productos importandole un rábano la gente que espera detrás. Se ve en bancos, cajeros automáticos inteligentes, supermercados, grandes almacenes, etc.

.-. Los individuos que destrozan bienes públicos y los dejan inutilizados para los demás.

.-. Adultos mayores que se atraviesan en plena calle y no te dejan pasar, al igual pasa en el transporte público, que no te dan paso, ni se sientan ni se mueven.

.-. No compartir información con el prójimo que este necesitado en determinado momento, es una forma de codiciar y ser bastante maluco.

.-. Cuando una persona está dando un discurso y su aforo lo interrumpe muchas veces, ignorando las normas del buen oyente/hablante y derecho de palabra.

.-. Cuando los vampiros emocionales te buscan cuando tienen un problema, pero desaparecen cuando tienen las defensas altas.

.-. Hacer bullying y mobbing.

La desconsideración es como un acto de rebeldía hacia los demás, un desaire y hasta desprecio e insensibilidad hacia el prójimo. Es como si solamente les importara su yo, yo y yo. Un desinterés total en el bienestar de sus semejantes, de que se sientan agradados, amados, respetados. Es poner sus intereses personales por encima de todo. Es no valorar lo que hacen por ti para satisfacerte.

Está claro que una persona egoísta es una persona desconsiderada y yo me atrevería a asomar que también es abusadora. El desconsiderado se gesta desde la infancia y se vuelve caprichoso porque lo hace adrede ¿Trata así a los demás por hobby o por qué ha visto ese modelo en casa y lo ha imitado o quiere llamar la atención de sus semejantes?. Carece de empatía. Los actos de desconsideración se ven en este mundo sumido en carencias afectivas entre familias y en la crisis moral y cívica que padece la sociedad. En un mundo globalizado, individualista y competitivo está a la orden del día.

No tiene nada que ver con culturas, los hay en todas partes, en gente que se cree educada y muy por encima de los demás, en gente que no fue a la escuela en su vida. Hay de todo en la viña del Señor. Seamos una luz en el camino y no oscuridad, abracemos la solidaridad y apliquémosla desde casa. No cuesta nada ser amable y cariñoso con los demás, ceder el paso, ser cortés y no hacerle daño.