Papi fue abrigo en la tormenta y risa en los días claros. Cinco años en el cielo. Bendita y eterna sea tu memoria, papá. Foto: Archivo familiar
Cinco años sin ti, papi. Se dice fácil. El tiempo es extraño cuando se trata del amor y la ausencia.
No puedo creer que ya van cinco años desde que te fuiste. A veces parece que fue ayer, otras veces siento que ha pasado una vida. Cinco años sin tus palabras que para mi eran hogar, escudo y dirección.
No quiero llorar, aunque el nudo en la garganta me visite.
Hoy solo quiero recordarte con gratitud, con amor profundo,
porque fuiste un papá hermoso, atento, presente.
Papi fuiste nuestro corazón de acero
firme, fuerte, valiente,
pero también lleno de ternura y cuidado.
Naza, mami, Andreu, Aarón, Juancito y yo te recordamos cada día.
Gracias por lo que me diste,
por lo que sembraste,
por haber sido el ejemplo que no se olvida
Por tu amor inquebrantable que nos sostiene todavía
por seguir acompañándome, aunque ya no estés aquí.
A la memoria de Ángel González (1943-2020)
Bendita y eterna sea tu memoria.
Te amo para siempre, papi. 💛